Polivalente.
La mejor definición del Matute es la de espacio polivalente al que puedes ir a tomar un estupendo brunch, a comer, a merendar o a tomarte un riquísimo cocktail. Tiene diferentes espacios: una terraza, una zona de sofás, la barra y el restaurante. La decoración y el estilo del local muy chulo y la música buena. El brunch lo puedes componer a tu gusto y va desde los 9 a los 25 EUR (con bagels, hamburguesas, tartas caseras...) y le puedes añadir un cocktail por 5 EUR más. La carta es bastante internacional: hummus con pan árabe, cous cous, burrata de la Pugglia, hamburguesa, langostinos al curry verde, ceviche, sopa de cebocha, magret de pato...y aunque lo normal sería pensar que quien mucho abarca, poco aprieta, la verdad es que todo lo que probamos estaba rico. Eso sí, la comida nos pareció muy cara: 40 EUR/ persona (2 entrantes, 2 platos principales, 1 postre, 2 cervezas y 1 botella de vino). En cuanto a los cocktailes, tienen una carta muy completa en la que destacan los cocktailes de Sake. También se pueden organizar fiestas privadas.
Matute
Plaza de Matute 12 (metro Antón Martín)
