Este recorrido se puede hacer en una mañana.
Comenzamos nuestra ruta en la Plaza de España que data de principios del siglo XX y es el eje que une la Gran Vía con la calle Princesa. En el Centro de la Plaza nos encontramos con el monumento dedicado a Miguel de Cervantes y las estatuas de Don Quijote y Sancho Panza. Justo detrás se ve el Edificio España y la Torre de Madrid. Otros edificios muy representativos de la Plaza de España son: el Edificio Gallardo (uno de los pocos ejemplos de arquitectura modernista en Madrid) y el edificio de la Real Compañía de Minas.
Desde la Plaza de España nos vamos a la calle Ferraz para dirigirnos al Templo de Debod. El Templo de Debod fue un regalo de Egipto a España en 1968 como agradecimiento por la ayuda prestada para salvar el templo de Abu Simbel, en peligro de desaparición por la construcción de la presa de Asuán. El Templo se trasladó desde su emplazamiento original en Debod, a orillas del río Nilo, hasta Madrid y se situó de manera que conservase aproximadamente la misma orientación que en su lugar de origen, de este a oeste. Este Templo estaba dedicado al dios Amón de Debod y su construcción se inició en el siglo II a.C. El Templo se puede visitar por dentro aunque lo mejor es admirarlo desde el exterior a la caída de la tarde. Para nosotros, lo mejor del Templo de Debod son las preciosas vistas que ofrece de Madrid y de la sierra así como los impresionantes atardeceres (éste y el atardecer desde el Palacio Real son los atardeceres más espectaculares de Madrid).
Del Templo de Debod salimos al Paseo del Pintor Rosales, una de las calles más bonitas de Madrid. Las vistas desde esta calle son privilegiadas ya que se trata de un mirador que bordea la antigua montaña de Príncipe Pío. Justo al comienzo de Rosales, a la altura del restaurante Los Porches, nos dirigimos hacia el Parque del Oeste en lugar de seguir por el Paseo del Pintor Rosales. La primera parada obligatoria del Parque del Oeste es La Rosaleda con más de 500 variedades de rosas. Es un lugar muy tranquilo y especialmente bonito en mayo ya que es cuando se celebra el Concurso Internacional de Rosas Nuevas. Desde la Rosaleda seguimos caminando por el Parque del Oeste, pasando por el Centro de Avifauna, la bonita ría artificial, el Manantial de la Salud, la estatua Homenaje al Maestro, la Fuente Juan de Villanueva...El Parque del Oeste es una verdadera maravilla y merece la pena dedicar un buen rato a pasear por él.
Salimos del Parque del Oeste en el cruce del Paseo de Moret con el Paseo del Pintor Rosales. Una opción si no tenemos prisa es coger el Teleférico. El Teleférico comienza en el Paseo del Pintor Rosales y termina en la Casa de Campo. En su trayecto sobrevuela la Rosaleda del Parque del Oeste, la estación de cercanías de Príncipe Pío, la ermita de San Antonio de San Florida y el río Manzanares.
Terminamos nuestro recorriendo paseando por Rosales y tomando una cervecita en uno de los míticos quioscos que hay a lo largo de todo el Paseo. En primavera es una delicia tomarse una cerveza al solecito disfrutando de esas maravillosas vistas.
Después de la cerveza, os recomendamos comer en uno de estos restaurantes de la zona (ver las críticas en nuestra sección de "Restaurantes"):
Dantxari
Quintana 30
Metro Bistró
Casa de Valencia
Casa Manolo.
