Pequeñas exquisiteces.
Hemos ido dos veces a Asiana Next Door y, si la primera vez salimos casi con hambre y habiendo pagado bastante, esta segunda vez hemos salido mucho más contentos. El local es pequeño, coqueto y con unos cuadros preciosos que están a la venta (caros, eso sí). La carta extensa, con platos que probarías todos. Nosotros esta vez nos decidimos por: Chapati negro de tinta de calamar con txangurro Massala y Raita, Satay balinés de pollo de corral con coco, lima y chile, Dumplings de gambón con salsa XO, Curry verde de pollo de corral y Tiradito de pez mantequilla con crema de Kalamata y cilantro. Todo exquisito, una combinación increíble de sabores que resultan una delicia y además con una presentación preciosa de los platos. Las raciones son pequeñas (éramos 2 y pedimos 5 platos y postre) y los precios caros. Es recomendable ir con la oferta del 30% en cuenta final del Club Kviar ya que si no, la cuenta sube muchísimo. Nuestra cuenta era de 96 EUR y con la oferta se quedó en 68 EUR por lo que la relación calidad-precio fue muy buena. Es perfecto para ir a cenar en pareja y disfrutar de unos sabores 10.
Asiana Next Door
Calle Travesía de San Mateo 4 (metro Tribunal)
91 310 40 20