Todo es mini.
Me encantan las croquetas y pensé que la Gastrocroquetería me iba a encantar...pero no. Las croquetas están buenas y de combinaciones muy originales pero para el precio que tienen son muy pequeñas. Les preguntamos cómo eran de grandes para calcular cuántas pedíamos y nos dijeron que tamaño normal...para mí una bola tirando a pequeña no es el tamaño normal de una croqueta. Lo peor de todo fue cuando pedimos la fidegua con costra: el tamaño es poco más que un pincho y cuesta 7,95 EUR. La comida no está mala pero la relación cantidad-precio es muy mala. Nosotros desde luego no vamos a volver.
Novedad: se han mudado a un nuevo local más amplio por lo que no estamos seguros si las raciones habrán dejado también de ser minis.
La gastrocroquetería de Chema
Calle Barco 7 (metro Gran Vía)
91 364 22 63