Un templo de la literatura.
Ya sólo por tener la oportunidad de sentarse en una mesa donde se ha sentado Alberti, Pérez Galdós, Valle-Inclán, Borges...merece la pena pasar una tarde en el Café Gijón. Es, desde 1888 cuando abrió sus puertas, el café literario por excelencia, testigo de tertulias magistrales, inspiración de obras (La Colmena), cita de libros y películas y motivo de las pinturas de grandes artistas.
Es todo un lujo pasar la tarde sentado en una de sus mesas simplemente respirando su historia. Eso sí, los precios son muy altos (un café: 4,40 EUR, un gin tonic de beefeter: 10 EUR). Por eso, una vez que ya has pasado una tarde sentado allí, lo que realmente merece la pena es probar el menú que ofrecen a través de El Tenedor:
